LA HISTORIA DE AGRIGENTO
Agrigento fue fundada en el siglo VI a.C por la población griega de Rodas sobre la llanura en la que hoy en día se encuentra el Valle de los Templos (reconocido como uno de los Patrimonio Mundial de la Humanidad de la Unesco). A lo largo de su historia ha tenido una diversidad de nombres: Akragas (periodo griego), Agrigentum (periodo romano), Kerkent (periodo árabe), Girgenti (periodo medieval) y Agrigento (desde el año 1927, periodo fascista).
Originalmente, en el territorio de Agrigento habitaba la población indígena de Sicilia: los Sicanos. Sin embargo, tanto Agrigento como el resto de Sicilia, ha sido objeto de diversas dominaciones de diferentes poblaciones. A partir del 406 a.C., Agrigento estuvo bajo el poder de los cartagineses (pueblo norteafricano); desde el 210 a.C. estuvo bajo el poder de los romanos (la ciudad fue renombrada como Agrigentum); en el 828 de los árabes (un periodo en el que fue edificado el centro de la ciudad moderna); en el 1087 de los normandos (período en el que se levantaron la Catedral y la Iglesia de Santa María de los Griegos); en el 1700 de losBorbones (que comenzó formando parte del Reino de Sicilia que luego se convirtió en el Reino de las Dos Sicilias); finalmente, en el año 1860, pasó a formar parte del Reino de Italia (territorio similar al de la Italia moderna) después de la revuelta de Garibaldi. Agrigento era también el centro de los barones y de los religiosos.
Durante los siglos a.C. había tres ciudades que eran consideradas como las más importantes de la isla: Agrigento, Siracusa e Imera (territorio que en la actualidad coincide parcialmente con la provincia de Palermo). Uno de los primeros tiranos más conocidos fue Nerón, quién junto al tirano de Siracusa, pudo mantener durante mucho tiempo el dominio sobre estas tres ciudades. Durante los años 460-470 a.C en la ciudad de Agrigento, el pueblo decidió establecer la democracia sobre la tiranía, pero en el 314 a.C. la tiranía volvería a ser dominante en la ciudad de Siracusa. Agrigento volvería a ser importante en Sicilia en el año 1817, durante el periodo borbónico, cuando Girgenti (el nombre de Agrigento en aquella época) se convirtió en una de las siete cabeceras sicilianas (junto a Palermo, Messina, Catania, Siracusa, Caltanissetta y Trapani) Desde el año 1922 Agrigento, al igual que el resto de Italia, estuvo bajo el régimen fascista que terminaría en el año 1943 después de los bombardeos británicos y estadounidenses.
A lo largo de la historia de la ciudad, Agrigento ha sido particularmente relevante para la agricultura, para la extracción de azufre y para las actividades turísticas y hoteleras (desde el siglo XX en adelante). En definitiva, Agrigento fue una de las colonias griegas más prósperas e importantes de occidente. Como prueba de ello, queda el magnífico Valle de los Templos y los valiosos hallazgos del Museo Arqueológico “Griffo”. De hecho, cada turista comienza visitando el Valle de los Templos, su propia excursión en la ciudad.
VISITAR EL VALLE DEL TEMPLO Y AGRIGENTO
La visita puede realizarla cada uno por cuenta ajena al adquirir un ticket para visitar la zona. Pero es cierto que de esta manera hay una gran probabilidad de no captar por completo la belleza y la historia que esconde la zona. De hecho, la mayoría de visitantes se limitan a pasear mientras observan los templos griegos construidos hace casi 2600 años. Al hacerlo así, se pierde más del 50% de la visita. Es aconsejable que se adquiera al menos una guía en papel o en audio en su idioma donde quede explicado detalladamente que se esconde detrás del blanco que queda en algunas columnas del templo de Dióscuros, o de rojo que queda en el templo de la Concordia. Tienen gran importancia las explicaciones sobre el templo de Zeus ya que de perderse una explicación en este templo podrá parecer tan solo grandes rocas de toba en el suelo.
Además, el paseo no lleva a otros lugares de interés como elbarrio Elístico-Romano, el Museo Arqueológico Griffo o el Gymnasium. Asimismo, se han hecho importantes descubrimientos como el Antiguo Teatro de Akragas, el Templo Romano y las Termas de Akragas.
Pero detenerse sólo en el área arqueológica sería algo reducido e incompleto.
La ciudad tiene mucho que demostrar. Empezando por su casco antiguo que fue construido en primer lugar por los akragantinos, luego por los árabesy también por los españoleso los franceses. Se trata de una cultura que ha sufrido tantas dominaciones que ha conllevado que el estilo y hábitos de sus habitantes se hayan visto alterados tantas veces. La historia ha pasado muchas veces por la ciudad de Agrigento, desde los griegos, romanos y cartagineses hasta la más reciente de los Chiaramonte, los mil de Garibaldi, el fascismo y el desembarco de los aliados en Sicilia durante la Segunda Guerra Mundial. Todos han dejado una huella que debe ser aún más conocidoy visto como la Iglesia de Santa María de los Griegos, de la Catedralo del Mudia, o el Museo Diocesano.
En el centro de la ciudad también hay mucho que ver, como el Teatro Pirandello, la Puerta de Puente, la calle Atenea y el Monasterio de Santo Spirito, ayudándose también con mapas específicos. Visitar el Valle de los Templos y no ver la ciudad sería equivalente a ir a París, visitar la Torre Eiffel pero no ver el resto de la ciudad. Agrigento y el Valle de los Templos son uno. Están conectadas en varias partes como en la Iglesia-Santuario de Demetra o en la Necrópolis Pezzino, pero sobre todo en Santa María de los Griegos.
Debido a esto, la visita debe ser completa y no parcial.